En Público nos cuentan algo acerca de los títulos de crédito: En la época dorada del cine los títulos de crédito eran una simple enumeración de los actores que aparecían en la película, minutos que aprovechaba el respetable para acomodarse en la butaca o ir a por palomitas. Ya sabemos que en aquellos tiempos de blanco y gris, y Cinemascope las películas eran mejores, así que necesariamente superaban en calidad a sus cabeceras. (Como nota, comentar que Star Wars no tiene títulos de crédito iniciales).
Pero esto de créditos simples dejó de ser así en el algún momento de las últimas tres décadas: los títulos de crédito fueron sofisticándose, a medida que las películas iban a peor. Títulos como ‘7even’, ‘Toro salvaje’ o ‘Watchmen’ son recordadas por sus cabeceras (y por lo que viene después). Otras, sin embargo, sólo por sus cabeceras.
Paso a mentar una de las más impactantes para mí, que es la primera en la lista de Público.
‘El señor de la guerra’ (2005)
Autor: Andrew Niccol (director)
“En el mundo hay un arma de fuego por cada 12 habitantes. La única pregunta es: ¿cómo armamos a los 11 restantes?”. Con esta frase, su mejor interpretación en toda la película, se abren los fabulosos títulos de crédito de ‘El señor de la guerra’: la vida de una bala de AK-47 desde su punto de vista subjetivo. ¿Y el resto? Una tontuna del que podríamos llamar “género Nicholas Cage” con pretensiones de análisis geopolítico de altura.
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